sábado, 10 de mayo de 2008

Antología de imágenes: la era del Fotolog

Por Camilo Sartori

No hay duda del gigantesco – y hasta alarmante- desarrollo tecnológico surgido en los últimos años. Desde el boom de los celulares y mensajes de texto hasta…el Fotolog. ¡Si! La masividad que ha adquirido este espacio en la actualidad, parece convertirlo en la especie de software social preponderante.

Preguntar qué es un Fotolog en la franja de los 10 a 20 años aproximadamente, de seguro carezca de sentido. Pero para los más grandes, Fotolog se refiere a una variante de blog, que consiste en una galería de imágenes fotográficas, acompañadas de un texto que introduce el responsable de la cuenta. En la mayoría de los casos se aceptan comentarios en la forma de libro de visitas, de otros “fotologuers”, usuarios de este servicio.

La adquisición de un Fotolog es totalmente gratuita, y respetando ciertas reglas –como no subir fotos de desnudos- , también es libre. Los hay de todos los colores, formas y con distintos contenidos.
E
s indudable que como dispositivo en boga, un público masivo -tal es el caso juvenil-, se aboca a su consumo por no “quedar afuera” de esta nueva modalidad de comunicación. El Fotolog –luego del mensaje de texto- se llega a convertir incluso, en el principal medio de diálogo entre muchos adolescentes.

Ahora bien, un Fotolog es un medio y como tal, la clave radica en el uso que se le otorgue. Sin inmiscuirnos en los factores que motivan la posesión de un espacio de estas características, se pueden conjeturar ciertas cuestiones generales.

La exposición que presupone este tipo de espacios es considerablemente alta. Se puede acceder a éstos a través de la web, desde cualquier parte del mundo. En ellos se pueden encontrar desde relatos sobre las salidas del fin de semana, hasta detalles precisos de la vida privada de los suscriptores.

Estas nuevas prácticas, conforman nuevos vocablos o resignifiacan los ya existentes. Una breve recorrida por estos espacios, nos topará con términos como: postear, fotologuers, FF, pic, “me pasé”, “nos leemos”, etc. Se puede decir entonces, que el fotolog, de alguna manera de-forma el lenguaje.

Pero… lo que está de moda hoy, pierde sentido cuando ya no es vigente. Seguramente llegará el día en que aparezca algo innovador, que supere al fotolog, y donde la privacidad se convierta en palabra a buscar en el diccionario.

2 comentarios:

Eliana dijo...

¿Después del fotolog que vendrá? Siempre está presente la guerra de las viejas formas de comunicarnos contra las nuevas, no es que las primeras sean mejores que las segundas -ni viceversa-. Hay que entender que estas modalidades innovadoras actúan -de modo lento y espontáneo- en nuestras prácticas culturales y lenguaje; y comprender que poco a poco vamos adaptando nuevos códigos de comunicación sobre la base de los existentes.
Hay que ver que tan sabios somos para seguir -parafraseando a Mario Benedetti- "prefiriendo
el viejo beso artesanal
que desde siempre, comunica tanto"

Nazu dijo...

Asistimos a una modificación del lenguaje que se acentúa en los medios tecnológicos a una velocidad mayor que en el cara a cara, donde abundan los gestos... Una pena, pero natural